En un contexto donde la presencia del cambio climático empieza a impactar sobre las fuentes de agua se plantean preguntas sobre la cantidad  disponible para los distintos usos que se le da al líquido elemento.

Las comunidades indígenas y campesinas que viven en la parte alta de la cuenca miran con preocupación como el agua escasea por el deshielo de las montañas y la ausencia de lluvias que hacen más largo los meses de estiaje. Ellos saben que es el cambio climático  el que está impactando  en  la agricultura y ganadería, dos actividades económicas a las que se dedican los comuneros y comuneras del Alto Pampas en Huancavelica.

Hay voces de alerta como las del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) que advierte ello y que no son tomadas en cuenta por las autoridades que se concentran en  elaborar proyectos  de infraestructura hidráulica para aprovechar y conducir las aguas  sin tener presente los efectos que ya está ocasionando el cambio climático.  Consecuencia de ello se tendrán obras de alta inversión  que no serán sostenibles en el tiempo  y que se convertirán en elefantes blancos.

Se necesitan inversiones sostenibles

A raíz de la constitución de la Mesa de Diálogo entre Ica y Huancavelica sobre la gestión del agua,  Beatriz Salazar del Centro Peruano de Estudios Sociales- CEPES   expresó que se deben realizar estudios sobre la disponibilidad de agua en los próximos  años viendo los efectos del cambio climático, ello permitirá   una adecuada gestión del agua y el ambiente  así como la sostenibilidad de las inversiones  que beneficien a los actores de la cuenca del río Ica-Pampas que une las regiones de Huancavelica e Ica y la  Micro Cuenca del río Cachi en Ayacucho.

Salazar agregó además que la gestión del agua debe estar acompañada de una real participación de las organizaiones para la legitimidad de cualquier acuerdo que se logre en la mesa de diálogo conformada recientemente el 17 de agosto del 2015.