La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH) lamenta la muerte de Carlos Lanci Yumbato, de 35 años, Julio Ticona Medina, de 31 años, y Francisco Areque Jipa, producto del uso excesivo de la fuerza de la Policía Nacional del Perú frente a los hechos ocurridos en la Región Madre de Dios debido a la huelga declarada por la Federación Nacional de Mineros Artesanales del Perú (FENAMARPE).

Ante ello la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos:

  1. Recuerda que este gobierno ofreció manejar los conflictos de manera democrática y sin recurrir a la violencia por que el costo de las vidas humanas no podría ser parte de la solución.
  2. Demanda al Estado, particularmente a la Policía Nacional del Perú, a no hacer uso excesivo de la fuerza, ni a comprometer vidas humanas. Y, hace el llamado a investigar exhaustivamente a los responsables de las muertes de los tres (3) ciudadanos.
  3. Indica que la minería informal ha causado un conjunto de afectaciones al medioambiente y a la amazonía, principalmente en esa región, por lo cuál es responsabilidad del gobierno atender esta problemática que también incluye a miles de personas que viven de esa actividad.
  4. Señala que las acciones de protesta deben ser llevadas adelante en el marco de los canales democráticos que las leyes nacionales amparan.
  5. Exige, ante la actual situación de violencia desbocada que ha producido hasta el momento la cifra de tres (3) civiles muertos, y cincuenta (50) personas con heridas de diversa magnitud, retomar la vocación por el diálogo y la solución dentro de los marcos institucionales.
  6. Finalmente, demanda al gobierno atender a los heridos del conflicto. A la emisión de este informe nos comunicaron que el Hospital Santa Rosa, de la localidad, no se encontraba en condiciones de atender a la cantidad de heridos, por lo que es urgente atender esta situación.

Lima, 14 de marzo de 2012

Secretaria Ejecutiva
Coordinadora Nacional de Derechos Humanos