Después de 24 años de ocurridos los hechos, el fiscal superior Luis Landa Burgos acusó al ministro del Interior del régimen aprista Agustín Mantilla de ser el presunto autor mediato del secuestro y asesinato de los dirigentes mineros Saúl Cantoral Huamaní y Consuelo García Santa Cruz, ejecutados por el grupo paramilitar Comando Rodrigo Franco.
En ese sentido, Landa solicitó para él una pena de 25 años de prisión y el pago de 200 mil soles de reparación civil. Lo mismo reclamó para los presuntos integrantes del Comando Rodrigo Franco: Jesús Miguel Ríos Sáenz –conocido como “Chito Ríos”–, Jorge Huamán Alacute, Enrique Melgar Moscoso, Carlos Farfan Yácila, Óscar Urbina Sandoval, Gino Fiori Gonzales, Juan Pampa Quilla y Walter Lauri Morales.
Mientras, se declaró extinguida la acción penal contra Augusto Calleja Carrasco, por fallecimiento.
Junto al secuestro y asesinato de Saúl Cantoral y Consuelo García, la Fiscalía acusa a Mantilla y al Comando Rodrigo Franco de la ejecución extrajudicial de los militantes del MRTA Luis Miguel Pasache Vidal y Sócrates Porta Solano, así como del «abogado democrático» Manuel Febres Flores.
Lesa humanidad
La Fiscalía sustenta que estos crímenes fueron perpetrados con gran crueldad y constituirían delitos de lesa humanidad pues fueron realizados de manera sistemática, generalizada, por personas vinculadas a la actividad estatal y dirigidos contra la población civil.
El fiscal emplea tres páginas, de las 54 que constituyen la acusación escrita, para fundamentar y sustentar la denominación de crímenes de lesa humanidad y evitar cuestionamientos posteriores de los jueces de la Corte Suprema.
La acusación a la que ha tuvo acceso La República se sustenta en el testimonio de cinco testigos protegidos identificados únicamente con las claves: 17-02-CVR, 06-03-CVR-UIE, WPM 20028, N° 0034, GS20060602.
Además, los testimonios de policías, funcionarios públicos y civiles que en diferentes momentos habrían tenido conocimiento de las actividades del referido grupo paramilitar y su relación con el gobierno de Alan García.
Comando RF
En la acusación se indica que se llegó a establecer la existencia del Comando Rodrigo Franco como un grupo formado por jóvenes integrantes del Comando Universitario Aprista (CUA) y miembros en actividad y retiro de la Policía.
Se anota que estos policías habrían prestado servicio en el Grupo Delta de la policía antiterrorista y el escuadrón Alfa de la División de Operaciones Especiales, quienes habrían recibido apoyo político, económico y logístico del Ministerio del Interior, a través de Agustín Mantilla.
“Dicha organización antes de llamarse Comando Rodrigo Franco tuvo varios nombres, como ‘Comando Antiterrorista puneño’, ‘Comando antisenderista’, ‘Pelotón Punitivo Puneño’, ‘Movimiento Haya Vive’, ‘Manuel Santa Chiri’, ‘Comando Regional de Aniquilamiento Cipriano’ y ‘Braulio Saga Pariona’.
Más de 80 acciones
Agrega que los jóvenes militantes apristas tuvieron activa participación en la campaña electoral que llevó a la presidencia a Alan García en 1985 y que posteriormente pasaron a actuar como guardaespaldas de funcionarios públicos y recibieron preparación militar a través de Agustín Mantilla. Un grupo de jóvenes –se anota también– incluso viajaron a recibir preparación especial en Israel y Corea.
El Comando Rodrigo Franco habría realizado más de 80 acciones entre asesinatos, atentados, secuestros y amenazas, y, según la Fiscalía, habría tenido como lema: «Si la justicia los libera, nosotros los eliminamos».
Subraya además que este comando de aniquilamiento selectivo tenía como centro de operaciones la avenida Dos de Mayo N° 1511, San Isidro, el fundo Barbadillo y se dividía en tres grupos operativos, con más de 20 integrantes, además de múltiples colaboradores e informantes en todo el país.
La Sala Penal Nacional prepara juicio
La acusación fiscal fue presentada ante la Sala Penal Nacional, que preside el juez superior Ricardo Brusett. En las próximos días se designará el colegiado que se hará cargo del juicio.
Todos los acusados en este caso se encuentran con mandato de comparecencia restringida.
Los dirigentes mineros Saúl Cantoral y Consuelo García fueron secuestrados en las inmediaciones del Parque Universitario, el 13 de febrero de 1989.Los asesinaron de varios disparos cerca del parque zonal Huiracocha, en Canto Grande.
Sócrates Porta y Luis Pasache se encontraban participando a nombre del MRTA de las negociaciones por el secuestro del general FAP Héctor Jerí García cuando habrían sido privados de su libertad, el 12 de agosto de 1988, para ser torturados hasta que murieron.
Manuel Febres se desempeñaba como abogado del senderista Osmán Morote cuando fue secuestrado el 29 de julio de 1988 y eliminado de un balazo en la cabeza en el túnel de la Herradura.
Rodrigo Franco fue un reputado dirigente aprista asesinado por Sendero Luminoso. El Comando utilizó su nombre para reivindicar su entrega desinteresada por el partido y el país.